domingo, 29 de agosto de 2010

No recuerdo haber olvidado...

“Vas a llegar tarde a tu propio funeral”,  ¿Te acuerdas? Cuanto más pienso en ello, más me parece una estupidez. ¿Qué clase de imbécil, después de todo, tiene prisa en llegar al final de su propia historia?


Pero tú eres diferente. Eres más perfecto. Para la mayoría de las personas, el tiempo viene a ser tres cosas. Pero para ti, sólo es una: una singularidad. Un momento. Este momento. Como si tú fueras el centro del reloj, el eje sobre el que se mueven las manecillas. El tiempo pasa en torno a ti pero no hace que te muevas. Ha perdido su habilidad para afectarte. ¿Qué es eso que dicen? ¿Que el tiempo roba? No a ti. Cierra los ojos y podrás comenzar otra vez de nuevo. Evoca esa emoción necesaria, tan fresca como las rosas.


El tiempo es absurdo. Es una abstracción. Lo único que importa es este momento. Este preciso momento, repetido un millón de veces. Tienes que confiar en mí. Si repites este momento las suficientes veces, si lo sigues intentando (porque tienes que seguir intentándolo) al final podrás llegar al siguiente punto dentro de tu lista.
                                                                      memento mori  jonathan nolan


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